Mi Güero:

Sé que tienes miedo y por eso estoy aquí.

Sé que me necesitas hoy, pero me necesitarás mucho más después.

Crecimos y aprendimos juntos,

seguiremos haciéndolo: siempre juntos.

Yo estaré contigo, porque tú has estado a mi lado;

seré tu apoyo, porque durante mucho tiempo tú has sido el mío.

No puedo siquiera imaginar, cómo es que el niño

que ayer era mi compañero de juegos,

hoy va a ser papá.

¿Recuerdas cómo dormíamos juntos

y apretados en mi cama

con tal de cobijar a todos nuestros muñecos en la tuya?

¡Cómo pasa el tiempo!

Sé que el porvenir te preocupa,

pero serás un gran papá...

Lo sé porque al caerme de la bici,

siempre gritaba tu nombre para que vinieras en mi auxilio,

y así lo hacías;

porque al chocar el coche de mamá

y al cometer mil locuras,

siempre estuviste ahí, a mi lado.

Sé que serás un gran papá

simplemente

porque el mío

tenía tu edad cuando me trajo al mundo.