
Cuando era pequeña soñaba con un cielo azul, con un mundo sin diferencias en donde la mentira y el odio eran solo palabras que ni herían ni separaban, simplemente porque no existían para mí, hoy sin embargo no puedo pensar igual, hoy las calumnias duelen, los golpes con palabras edifican muros que alejan lo que debería estar unido, la hipocresía se ha convertido en la estúpida bandera de quienes dicen amar algo que desconocen, los amigos se empeñan en disfrazarse de enemigos y los ideales comunes que nos hicieron coincidir en este camino hoy parecen ser como las líneas paralelas que jamás encontrarán un punto de unión.
Sí, es triste, pero cierto. Yo con todos mis defectos, podré haber sido muchas cosas, pero nunca he sido lo que pretendes que otros crean: la traición es un arma de doble filo que nunca he usado porque no creo en ella, no ha sido ni será parte de mi actuar.
Cuido mucho mis palabras, eso también es cierto, pero una vez que salen de mi boca soy congruente con ellas hasta sus últimas consecuencias, se cuidar a mis amigos y valoro la lealtad como un tesoro, vivo intensamente y me ocupo de las cosas que verdaderamente importan.
Somos diferentes y en eso no hay dudas, yo asumo el costo de mis errores, no importa lo que eso implique; tú por el contrario buscas culpables en el infinito y parece que no quieres darte cuenta que es mucho más honesto buscar dentro de nosotros mismos las equivocaciones que hoy nos tienen donde estamos... todo, absolutamente todo tiene un costo y cada uno de nosotros decide cuánto está dispuesto a pagar por ver cumplidos nuestros sueños.
El mundo ya no es lo que solía ser, pero no estoy dispuesta a permitir que hables sin razón, que juzgues sin pensar y que ensucies lo que a otros tanto nos ha costado dejar limpio... en esta brega de eternidades no necesitamos personas que hablen de respeto por la mañana y en las noches lancen como piedras sus insultos, no nos sirven aquellos que abrazan cara a cara y hieren por la espalda, salen sobrando los que no han entendido que por sobre nuestros intereses esta algo más grande: este gran proyecto que nos ha dado mucho más de lo que nosotros hemos podido darle...
Somos jóvenes y jamás nos estará permitido dejar de luchar, hoy pese a lo que dices que soy y a lo que pienso que eres, te pido tomarnos las manos con fuerza por que la verdadera batalla esta allá afuera.
2 comentarios:
Libia: te conozco hace ya muchos años y al leer esto que escribiste se lo que sientes y porque lo dices, eres y has sido mi ejemplo, tienes algo que contagia y los que te conocemos sabemos quien eres y lo que vales... recuerdas que un día me dijiste "Escucha solo las palabras que algo te dejen y observa siempre quien te las dice" ahora uso tus propias palabras para hacerte ver que no solo yo... muchos creemos en tí... sigue caminando que vamos detrás de ti.
Querida amiga:
Octavio Paz, uno de los mexicanos que más admiro, dijo al recibir el premio iberoamericano de escritores:
"Soy hombre: duro poco
y es enorme la noche.
Pero miro hacia arriba:
las estrellas escriben.
Sin entender comprendo:
también soy escritura
y en este mismo instante
alguien me deletrea."
Me da gusto y aprecio leer las reflexiones de una mujer que no se pierde en la pequeñez de querer saberlo todo…solo porque así lo han entendido quienes han hecho las grandes revoluciones en nuestro mundo.
La extrañeza que provoca nuestra ingenuidad, ha creado el mito de monstruos que solo buscan satisfacciones personales, casi siempre mezquinos y faltos de esa coherencia que bien describes. En esa “soledad bendita”, en ocasiones me pregunto lo mismo que hoy me haces recordar al leerte…y a veces, me da miedo el recelo que provoca también una actitud ajena, sobretodo cuando la violencia emocional nos desgarra, nos pega duro. Pero siempre llego a la misma conclusión: quizá, lo que hoy sea esplendor de convicciones, será dentro de algún tiempo, aquel cielo azul que todos vimos cuando niños, y que hoy sabemos lo lejos que esta.
La política es la sombra permanente de dos pasiones: la libertad y la crítica. Gracias por compartir esas pasiones tuyas.
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